viernes, 16 de mayo de 2008

Día 5


Por fin el periódico EL PAÍS incluye nuestra acampada en el apartado de noticias relacionadas con la educación, aunque no encontramos, en la información que aporta, ningún trazo de la nota de prensa que elaboramos y enviamos ayer. Una vez más, la crónica se centra en la cuestión de la reducción horaria de la asignatura de Filosofía y Ciudadanía (1º bachillerato), y no hace referencia alguna a nuestras reivindicaciones con respecto a la forma en que se pretende impartir Educación para la Ciudadanía (2º de la ESO). Agradecemos la amabilidad con la que se describe nuestra iniciativa, pero no queremos dejar de recordar que la Asamblea se opone abiertamente a aspectos del borrador relacionados con esta asignatura (como la imposición de impartirla en inglés, la contemplación de una posible objeción a la asignatura o el establecimiento de modalidades de evaluación que atentan contra la libertad de cátedra).


Nuestra crítica puede tener un aspecto corporativista, en la medida en que nuestras exigencias están relacionadas con nuestro futuro laboral. Pero a la hora de plantear nuestros objetivos hemos pretendido ir más allá de esto, porque consideramos que una reducción horaria significa también un empobrecimiento en la formación que se les ofrece los alumnos, especialmente en lo que respecta a la riqueza de perspectivas y la capacidad crítico-reflexiva.


Hoy sabíamos que se acababa el plazo que la policía (es decir, el Ayuntamiento de Valencia) nos había dado para abandonar el campamento. Ayer decidimos ya, reunidos en asamblea, la forma en que queríamos reaccionar al desalojo. Después de considerar y discutir las opciones que teníamos, acordamos no ofrecer resistencia y realizar un acto de protesta simbólica en rechazo al desalojo.
Así pues, cuando ha llegado la policía y nos ha pedido que “procediéramos a recoger el campamento”, los estudiantes que hemos participado en la acampada, junto con aquellos que han querido solidarizarse, nos hemos sentado en el suelo de nuestro campamento, entre las tiendas aún plantadas, con la boca sellada… porque es así es como entendemos que nos quiere la Conselleria de Educación: sin voz que alzar contra la forma en que insulta a la enseñanza pública, y se encarga de poner trabas al papel transformador que debería desempeñar en la filosofía dentro de esta. Ambos gestos se ponen de manifiesto en la orden de borrador cuya retirada hemos demandado con nuestra iniciativa.
Acto seguido, nos hemos levantado en silencio y nos hemos dirigido al interior de nuestra Facultad uno tras otro y cogidos de la mano: allí es donde trasladaremos nuestro campamento hasta el próximo miércoles, día en que recogeremos nuestras tiendas para acudir a la manifestación convocada por los sindicatos y asociaciones de profesores.

A continuación, os ofrecemos el texto que uno de nuestros compañeros ha leído mientras permanecíamos sentados en silencio:

Los estudiantes de filosofía, convocados por la Asamblea de Estudiantes de Filosofía de Valencia, tomamos la iniciativa de acampar en los jardines de la Avenida de Blasco Ibáñez en protesta contra el proceso de reformas iniciado con la implantación de la LOE y la forma en la que nuestra Conselleria de Educación tiene intención de aplicar esta ley en el País Valencià. En especial, queríamos llamar la atención sobre aquellos aspectos de esta ley que afectan a las asignaturas relacionadas con la filosofía, puesto que consideramos que tanto la ley, como la orden de borrador elaborada por Conselleria imponen una paulatina desaparición de la filosofía del ámbito de la educación secundaria. Concretamente, cómo expresamos en nuestro manifiesto, nos oponemos a la reducción horaria de la asignatura de Filosofía y Ciudadanía en primero de bachillerato que prevé el borrador, al hecho de que se reconozca el derecho a objetar la asignatura de Educación para la Ciudadanía en segundo de ESO, a las absurdas opciones de evaluación del alumnado que obliga a ofrecer a todo centro (que violan la libertad de cátedra), y a la imposición de impartir la asignatura en inglés.

Durante estos días hemos tratado de informar, concienciar y difundir nuestra protesta entre la comunidad universitaria y la sociedad en general, recogiendo firmas y preparando las jornadas informativas y críticas que traten este tema desde distintas perspectivas, que tendrán lugar entre los días 20 a 22.
Pero además, en este jardín hemos asistido a clases, hemos leído y debatido textos que nos recuerdan porque aún hoy sigue teniendo sentido estudiar Filosofía.

Hoy viernes 16 de Mayo, nos vemos forzados a abandonar el Campamento Diógenes en defensa de la Filosofía y la Educación Pública. Los estudiantes hemos decidido reunidos en Asamblea adoptar una actitud de resistencia pacífica, sin dejar de expresar nuestro rechazo al desalojo policial.
No obstante, con el apoyo de nuestra Facultad, hemos decidido continuar con nuestra acampada reivindicativa en el jardín de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación, desde donde seguiremos organizando actividades hasta el próximo miércoles día 21 en que levantaremos voluntariamente nuestro campamento para unirnos a la manifestación convocada por los sindicatos y asociaciones de estudiantes y profesores.

Queremos agradecer el apoyo prestado por los jardineros municipales, la directiva de la Facultad, los profesores que espontáneamente decidieron impartir sus clases en nuestro campamento y a todos los estudiantes y demás personas que se han unido a nosotros en nuestra lucha (bien firmando nuestro manifiesto o bien participando en el campamento).”


Asamblea de Estudiantes de Filosofía

A todos los que habéis estado ahí durante todos estos días, gracias otra vez y mucho ánimo…porque esto no acaba aquí, y lo vamos a seguir necesitando. Nuestras tiendas vuelven a estar en pie, esta vez sobre el césped del jardín de nuestra Facultad y con ellas nuestras ganas de reclamar una educación pública de calidad y que apueste por la filosofía.

11 comentarios:

Mr. Crápula dijo...

Estimados amigos del Campamento Diógenes:

Sin ánimo de ofender, me gustaría comentar algunas ideas que me han aparecido en mi mente a lo largo de un tiempo.

Desde aquí, como investigador radicado actualmente en los EEUU, quisiera, no despreciar la filosofía como tal, sino reivindicar algo más aplicado a la vida diaria.

Durante unos 11 años, he podido ver cómo siempre habéis (los estudiantes de filosofía) protestado por las escasas salidas laborales de vuestra área de conocimiento, dado que únicamente podéis enfocarlo a la docencia; vuestras demandas han estado siempre encaminadas hacia el tópico de que la falta de la filosofía en el ámbito académico origina una falta de criterio y de reflexividad en las futuras generaciones. Ahora bien, desde mi posición con cierta experiencia me pregunto: ¿En qué puede ayudar a un estudiante de secundaria el conocer de memoria la vida y obra de Kant, Descartes, Platón, etc...., si lo único que se aprende es una serie de conocimientos que yo recuerdo más históricos que filosóficos? Me cuestiono: ¿No sería más práctico el dialogar acerca de los problemas contemporáneos para luego incentivar y promover la lectura de esos clásicos de una manera aplicada?

Estimados amigos filósofos: ¿Qué me estáis contando con que la falta de filosofía en secundaria conlleva una falta de capacidad crítica en los estudiantes? Como apasionado de la historia en su versión de lectura como disfrute, desde aquí os conmino a que dejéis de llorar porque os quitan el pan y porque sin la filosofía de aula los chavales no tendrán criterio; os exijo que abandonéis ese corporativismo amparado en el beneficio común; os propongo que defendáis una visión aplicada de esa misma filosofía que intentáis vendernos pero de manera que no se olvide, porque si insistís en introducirla con calzador, solamente conseguiréis que se vea como una asignatura inútil que hay que aprobar para poder pasar de curso. Os lo dice un científico que adquirió sus criterios sociales y humanos a base de leer la historia de la humanidad (sin que las pruebas de la existencia de dios de Hume y Descartes y la crítica de la razón pura de Kant le sirvieran de nada) y de querer pensar que el hombre no es un lobo para el hombre.

Saludos desde San Diego, EEUU

jara21 dijo...

Tienes parte de razón en lo que dices, yo también soy partidario de un cambio sobre la manera de enfocar la filosofía en las aulas, pero no me quedaría solo hay y me atrevería a exigir, como haces tu a veces no con mucha razón o precipitándote, una reforma general del sistema educativo en institutos y universidades.

Haces la pregunta de en que puede ayudar a un estudiante el conocer la vida y obras de Kant, Platón... yo no te voy a contestar a esa pregunta porque deberías hacértela tu, plantéate si te ha servido de algo el conocer la vida de Kant. El problema de todo esto es que para poder hacerte esa pregunta necesitas conocer la vida de Kant de antemano. Si para criticar hay que conocer, yo quiero conocer cuanto pueda.

Respecto a lo que dices, que la filosofía debería guiarse de una manera mas pragmática es algo en lo que tienes razón, se deberían fomentar los debates y las actividades de investigación

Ya solo decir que a tu ultima critica acerca la capacidad critica en los estudiantes no le veo ni pies ni cabeza, el sistema educativo actual se esta encaminando hacia un pragmatismo extremo, no voy ha hablaros ahora del maravilloso plan Bolonia, cuyo fin es el de crear a personas que sean totalmente eficientes para engrasar las maquinas del capital con sus habilidades, habrá grandes médicos, pero lo que no habrá si seguimos así será quien se plantee los limites de las aplicaciones medicas y tecnológicas, algo que a mi personalmente me interesa bastante.

claudia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Unknown dijo...

Con el permiso espero de l@s estudiantes para publicar mi comentario:

Estimado Mr. Crápula:
Sin ánimo de ofender, me gustaría expresar algunas ideas que me han venido ala mente mientras leía su comentario a las reivindicaciones de l@s alumn@s universitarios de filosofía, que son también las mías.
Disculpe que comparta con usted mis reflexiones en voz alta sin conocer el contexto en el que se formó cuando estuvo en el instituto, ya que por lo tanto, éstas mis reflexiones están basadas solamente en juicios aproximativos a lo que considero fue su experiencia allí.
Me gustaría sumar mi inquietud a la suya cuando formula su primera pregunta sobre el sentido de aprender solamente con métodos memorísticos filosofía (haciendo así una especie de historia de la filosofía como usted dice), de igual manera que me surge la misma inquietud con respecto a otras áreas que se imparten en los institutos ("historia de la humanidad", lengua, geografía, "ciencias naturales" y un largo etcétera que conforman los curriculums de secundaria y bachillerato).
Me siento en la obligación y con el derecho de contestarle públicamente como profesor de secundaria y bachillerato radicado actualmente en la Comunidad Valenciana en una suerte de "respuesta por alusiones". Siguiendo con mi desconocimiento del contexto en el que se formó usted en secundaria, querría comentarle que su inquietud la comparten no pocos (que no todos) profesor@s de secundaria de diferentes especialidades que procuran constantemente que sus clases sean "laboratorios pedagógicos" donde la nemotecnia sea sólo una herramienta más y no la norma, donde se pueda acudir a l@s autores desde la "reflexión sobre problemas contemporáneos" para ver la verdadera dimensión de historiadores, filósofos, literatos...
Quiero decirle con esto que la incomunicación existente entre investigadores, profesor@s de universidad o cualquier persona en otro puesto de trabajo adoptado desde la perspectiva de asumir otra salida laboral después de la universidad que no sea la docente, la incomunicación -decía- entre todos ellos y los propios docentes de secundaria y bachillerato lleva a recoger y expresar tópicos en torno a que desde los institutos se "ejerce muy bien el funcionariado" sin importar lo que fuera formar a personas de manera integral y desde la reflexión crítica, disfrutando de un puesto de trabajo que permita "trabajar poco limitándose a repetir contenidos vacíos a memorizar".
Le agradezco su crítica, es positiva en tanto es común a muchos docentes, recomiendo igualmente que l@s estudiantes se "apasionen por la historia en su versión de lectura como disfrute" y animo a toda persona ajena al mundo docente de secundaria a que se informe y contacte con profesor@s de cualquier especialidad que apuestan por una renovación pedagógica que permita al alumnado de instituto volver a disfrutar del conocimiento en todas sus áreas, con la curiosidad propia del ser humano que le lleva a, sin quererlo (ups!), hacer filosofía cuando reflexiona. No me cabe sino darle las gracias por su reflexión.

Atentamente:

Heriberto Mira, profesor de filosofía en secundaria y bachillerato perteneciente al grupo Filosofía Resiste

claudia dijo...

Hola mr.crápula,

1. Creo que tu crítica está descontextualizada: no tiene en cuenta las circunstancias en que nos encontramos. Para comprender lo que reclamamos con el campamento sería bueno que leyeras nuestro manifiesto, así como la orden correspondiente a Educación para la Ciudadanía, uno de los motivos de nuestra protesta (los links de esta página no funcionan de momento, pero puedes conseguirla desde http://www.profesfiloalicante.blogspot.com).
San Diego queda lejos de aquí y es posible que no estés muy enterado de cómo andan las cosas en el sistema educativo español, y más concretamente aquí en la Comunidad Valenciana, dónde la privatización de los servicios públicos se ha convertido en una constante, y dónde gozamos de un gobierno que por pugnas partidistas y por su cercanía ideológica a determinados sectores sociales reaccionarios ha elaborado un borrador de aplicación de la LOE (ya insatisfactoria, desde mi punto de vista) que es literalmente una burla a todo sujeto de mediana inteligencia. Digo burla, porque no creo siquiera que dicha orden pretenda ser tomada como una propuesta seria de aplicación de la ley.

2. Sobre el contenido de tu crítica:
Con respecto a la cuestión de la reducción horaria (el segundo de los problemas que tratamos), considero que el hecho de que filosofía pierda una hora en primero no sólo nos afecta a nosotros como futuros profesores. Obviamente, esta medida nos perjudica como colectivo, y obviamente en ello resie parte de nuestro descontento (no creo que haya nada de despreciable en esto, sobre todo cuando se expresa honestamente). Pero además de esto hay variables que tendemos a olvidar, y voy a exponer algunas:

-La ley contempla un aumento del temario en una asignatura a la que reduce las horas (Filosofía de 1º de Bachillerato). Además, el aumento de temario se produce por la introducción de temas que tienen que ver con la “ciudadanía” que restan, si cabe, más espacio a las cuestiones propiamente filosóficas.

-La Filosofía de 1º de Bachillerato es una materia que permite a los estudiantes acceder a un conjunto de contenidos que hacen posible que se planteen el estudio de determinadas carreras en el futuro. Si esta asignatura pierde tiempo y deja de tratar estos contenidos, la apertura del horizonte profesional del alumno medio se ve sesgada. La asignatura permite que el alumno se haga una idea de lo que es, por ejemplo, la antropología o la sociología, y que desarrolle cierto interés por estas materias.

-Mientras se le restan horas a la Filosofía, se siguen manteniendo (en un sistema público de enseñanza presuntamente laico) las horas dedicadas a la asignatura de Religión. Es bueno recordar que simplemente cambiando la distribución de estas horas (sin siquiera suprimir esta asignatura) podría evitarse la reducción horaria que criticamos.

-La filosofía es un espacio privilegiado para fomentar la reflexión y la actitud crítica en todos los ámbitos. (a explicar porqué creo esto dedico el sgundo punto de este comentario).
Estoy de acuerdo contigo en que la Filosofía habría de impartirse de forma que el alumno no se viera forzado a considerarla como un conjunto de ideas abstrusas que poco tienen que ver con la realidad a la que se enfrenta en su vida cotidiana. Creo además que todos los que, de un modo u otro, “hacemos filosofía” deberíamos reflexionar sobre la forma en que concebimos su función dentro de la sociedad, porque llevamos mucho tiempo anclados en una visión autocomplaciente, y hemos conseguido que la gente sienta nuestra materia como algo totalmente ajeno a su quehacer (y, por tanto, prescindible).
La filosofía no son un conjunto de textos muertos, sino un conjunto de cuestiones que hemos aprendido a plantearnos desde muy diversas perspectivas. Estas cuestiones tienen que ver con todas nuestras formas de de actividad, pero suponen siempre la adopción de una actitud radicalmente crítica y “preguntona”. En caso contrario, lo que hacemos no es filosofía, sino una crónica periodística de autores importantes por el mero hecho de ser “clásicos” y enunciados ininteligibles.

Dicho esto, espero que comprendas porqué no estoy dispuesta a “dejar de llorar”. Me congratulo de que hayas aprendido a ser una persona crítica por tu cuenta, pero, ¿He de presuponer esta misma sagacidad y “buen hacer” en todo estudiante español medio? En este punto recurro a las reflexiones de Juan de Mairena: “Se dice que vivimos en un país de autodidactos. Autodidacto se llama a aquel que aprende algo sin maestro. Sin maestro, por revelación interior o por reflexión autoinspectiva, pudimos aprender muchas cosas, de las cuales cada día vamos sabiendo menos. En cambio, hemos aprendido mal mochas otras que los maestros nos hubieran enseñado bien. Desconfiad de los autodidactos, sobre todo cuando se jactan de serlo.”

Hay cierto sentido en el que “poner las cosas en cuestión” es algo que hace cada individuo por sí mismo. Pero esta actitud, como muchas otras, también “se aprende”, y creo que una clase de filosofía bien enfocada es un buen espacio para intentar “enseñarla”.

3. Por último, sólo quisiera pedirte que en lo sucesivo utilices un tono y un léxico menos agresivo, porque algunas de las expresiones que utilizas me han resultado molestas (supongo que es lo que pretenden). Creo que es bueno preocuparse de no malentender una iniciativa antes de criticarla en estos términos. Especialmente en este caso, en que el emisor critica una visión de la filosofía que nosotros, como Asamblea, ni suscribimos ni dejamos de suscribir (aunque creo que muchos estamos, en lo esencial, de acuerdo contigo).

Un saludo!

Unknown dijo...

Muchas gracias Claudia por expresar con más claridad lo que quería transmitir en mi comentario. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices.

Heriberto Mira

Mr. Crápula dijo...

Estimados navegantes filósofos:

Durante un segundo tras entrar al blog me he escandalizado al no conseguir localizar el comentario y sus posibles respuestas, pero tras serenarme un poco, he conseguido llegar a él. Supongo que es lo que tiene el estar aún entre las sábanas.

Con respecto al comentario en sí, sólo puedo congratularme de ver que he sido capaz de provocar una respuesta muy satisfactoria en vosotros. Leyendo un poco más, he podido ver que la mayoría de comentarios son de apoyo (algo loable), pero ninguno que, al paseante que pare por aquí, explique un poco las raíces del problema con el sano ejercicio del diálogo.

Veo que difiriendo en nuestra formación, queremos alcanzar los mismos objetivos, y también es cierto que olvidé reconocer que somos todos individuos atrapados en un torrente de intereses políticos y baboseos variados que no hacen sino llenar de miseria la educación. Pido pues humildes disculpas por ello.

Debo admitir también que la última parte de la crítica se salió de tono un poco (claudia) pero también por esa primera aproximación despreocupada que hice. La razón para ello ha sido el encontrarme en la universidad (no ya en el instituto) a gente que, camuflados tras las protestas, se dedicaban a gandulear, ir a la cafetería e incluso a dormirse en los jardines. Con esa base, era imposible no pensar que en realidad, y como imagen inicial, los filósofos en formación se llenaban la boca con palabras vacías. Veo, con alegría, cuán equivocado estaba.

Con respecto al tema de la enseñanza, el problema no es la LOE, o en los profesores o en los temarios. El verdadero problema viene desde más atrás. Viene de que la sociedad española no se involucra en lo que es de provecho para ella; recibe con apatía el trabajo y se dedica con pasión a fichar de 9 a 3 para tomar cafés. Realiza con ahínco el ejercicio de la envidia hacia el que ha conseguido llegar más alto para, si puede, intentar bajarlo a trompicones de su pedestal. El problema es que muchas familias delegan la responsabilidad de la educación en los valores básicos del entorno doméstico en la calle, la TV e internet. El problema, amigos, es la indolencia de la sociedad española, y eso, rellenando papeleo español desde San Diego es algo que aún me escuece.

Cuando esta sociedad en bloque se movilice para pedir que la educación sea cambiada por una más lógica y apropiada y no para evitar que dos equipos de fútbol bajen a segunda; cuando se planten delante del gobierno que sea y le espeten: Nosotros te dimos el poder, nosotros te lo vamos a quitar porque no nos has representado, en lugar de promover plataformas porque la sra. Telma Ortiz ha metido a pleito a revistas basura; en resumen, cuando la sociedad entera esté dispuesta a pegarle una patada al quiosco, yo, parafraseando a Antonio Gala, estaría dispuesto a pegar la primera aunque me quedara sin pie. Ése es el verdadero problema de lo que pasa, y eso es lo que afecta a la filosofía, a la ciencia y, en general, a todos. Sí que es cierto que sin una capacidad crítica, estamos en una pescadilla que se muerde la cola, pero, tirándole un poco de la lengua a claudia, con la filosofía encauzas y/o enfocas una serie de ideas/pensamientos/modos de pensar que ya se deberían de tener con anterioridad, Hoy día, con internet, ya no vale la excusa de que no se tiene acceso al conocimiento. Solamente acepto como válidas el que no se pueda por falta de tiempo o que el trabajo nos quite las ganas.

Un saludo desde el otro lado del charco, cantera del pensamiento (sin ganas de tirar de la lengua a nadie).

Mr. Crápula dijo...

Debo puntualizar que los comentarios de apoyo son en otros posts, y que los comentarios críticos faltaban en esos posts; los vuestros son muy efectivos.

Un saludo!

Sandra dijo...

Bueno, según el comentario expuesto por Mr cárpula, exponer los siguientes puntos:
1) No creo que una persona sea capaz de erradicar problemas sociales si primero no es capaz de proporcionar unas herramientas adecuadas. Estas herramientas serían el conocimiento de algunos filósofos para saber de dónde provienen esos problemas y cuáles han sido las opciones propuestas.
2) Nosotros intentamos que con esta iniciativa el pensamiento sea lo que mueva a la persona a querer conocer más y a poder criticar o argumentar con unos criterios básicos. Esto se puede aprender con algunos filósofos como Descartes o Wittgenstein, entre otros.
3) Por último, no creo que seamos unos llorones sino todo lo contrario, unos resignados al ver que lo que prima en este momento no es el pensar, sino la técnica. Y ver que la gente no se da cuenta de que esa técnica existe gracias a la gran madre que es la filosofía y la repudie. También añadir que no es que nosotros queramos que la filosofía no tenga más aplicaciones prácticas, sino que nos dejen tenerlas. Un saludo a tod@s y resistencia!!!

Sandra dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Irrelevante dijo...

Hola, soy uno de lo estudiantes acampados en Blasco Ibañéz, y a Mr Crápula sólo me gustaría decirle que protestar, gandulear, ir a la cafetería y dormirse en los jardines son actividades que considero de lo más dignas y loables.

El resto de 'críticas' no las comentaré porque creo que no hace falta, y porque además mis compañeros, mucho más brillantes que yo, ya se han encargado de hacerlo con facilidad y eficiencia.

Un abrazo a todos.